A-66 El verdadero valor de la obra

La Deuda »
Martes, 13 de septiembre de 2011
elconfidencial.com» Actualidad
Piden al Tribunal de Cuentas Fiscalizar la Licitación de la A-66

Al Ministerio de Fomento, cuyo titular es José Blanco, empieza a salirle cara la crisis económica. Prueba de ello son algunas obras que su Departamento quiere dejar licitadas, cueste lo que cueste, antes de las elecciones del 20-N. Pero ese “cueste lo que cueste” tiene a veces un valor demasiado alto: hasta tres veces más sobre su coste real en el caso de la licitación de la Autovía de la Plata, según denuncia el PP ante el Tribunal de Cuentas.

El pasado 19 de agosto el Consejo de Ministros autorizó la licitación del Centro de Concesión de Obras públicas de título Ejecución, Conservación y explotación de la Autovía de la Plata (A-66) entre Benavente y Zamora. Unos días después, el 24 de agosto, el Boletín Oficial del Estado publicaba el anuncio de dicha licitación con un presupuesto base por un importe de 1.356 millones de euros. Hasta aquí, todo aparentemente normal.

Pero una vez examinados los pliegos de condiciones, cosa que hicieron tres senadores del Partido Popular, se podía comprobar una situación curiosa. El contrato comprende, según el escrito presentado por el PP ante el Tribunal de Cuentas, tres áreas de actuación: una primera de “Obras de primer establecimiento presupuestadas en 234,24 millones de euros, incluidas las expropiaciones, el PHE y el 18% de IVA”; una segunda área de “actuaciones de reposición y gran reposición por importe de 75,76 millones de euros”, incluido también el IVA; y una tercera de “conservación y explotación de las infraestructuras por importe de 64,86 millones de euros”, IVA incluido.

El resultado total es de 383,87 millones de euros, según consta en el escrito que estos tres senadores del PP han elevado al Tribunal de Cuentas para que fiscalice la obra, y al que ha tenido acceso El Confidencial. ¿Por qué esta fiscalización? Pues porque entre esos 383 millones y los 1.356 de la licitación, existe una diferencia de 972 millones de euros, es decir, casi tres veces el presupuesto real de la obra, que comprende los gastos financieros de la misma.

“Resulta sorprendente que los gastos financieros casi tripliquen a los gastos de inversión, y es por tanto llamativo que el coste final para los ciudadanos suponga que se grave en casi 1.000 millones de euros una obra valorada en menos de 400 millones de euros”, dice el escrito presentado el 6 de septiembre, y por esa razón se pide al Tribunal de Cuentas “que fiscalice la referida licitación a los efectos de valorar su legalidad, incluidos los compromisos de limitación del déficit público recientemente acordados por el Parlamento” en referencia a la Reforma de la Constitución que la semana pasada culminó su trámite parlamentario en la Cámara Alta.




« La Casa de Tócame Roque »

El artículo tiene un enfoque erróneo hacía lo que supone la licitación, pero no aclara la financiación, posiblemente, por desconocimiento de cálculo financiero elemental. Una concesión con financiación a 30 años, al tipo de interés actual, y con baja inflación previsible, alcanza el valor de licitación. Sólo hay que hacer las cuentas. Un poquito de rigor o mejor un mínimo de conocimiento financiero elemental.
Véase el estudio de viabilidad Fomento-Pricewaterhouse ¿Dónde está el problema?
Desde luego no está en el importe de licitación que está bien calculado, sino en que el importe que el Estado tendrá que abonar anualmente al concesionario, por financiación, beneficios, coste de estructura, conservación y explotación, durante los próximos 30 años, a partir del 2015, es otra deuda más, indirecta, para unas arcas vacías del Estado.

Cómo seguir endeudándose sin dejar rastro en las cuentas públicas.

El 24 de agosto de 2011 apareció publicada en el BOE la licitación del contrato de concesión para la ejecución, conservación y explotación del tramo de la autovía de la Plata entre Benavente y Zamora.

El concesionario que resulte adjudicatario del contrato tendrá que construir esta autovía, y conservarla y explotarla durante 30 años. A cambio percibirá mensualmente una retribución económica (o canon, como se denomina en el contrato) por parte del Estado. Este canon se comenzará a cobrar a partir del momento en que se ponga en servicio la autovía y hasta el fin de los 30 años de concesión. Es decir, probablemente desde 2015 hasta 2042. Este canon es una cantidad que se actualizará en función de la inflación, es independiente del tráfico de la autovía, y podrá reducirse a la baja si la calidad del servicio prestado por el concesionario es deficiente.

El canon, lógicamente, tendrá que compensar al concesionario por los costes de construcción, conservación y explotación de la autovía, los propios costes de estructura del concesionario, los importantísimos costes de financiación de la deuda que tendrá que soportar el concesionario,… así como atender unos beneficios que hagan atractivo al capital privado acudir a esta inversión. Pues bien, el pago que el Estado tendrá que abonar anualmente al concesionario se estima en 33 millones de euros en 2015. En 2042, la cantidad llegará a subir presumiblemente hasta los 51 millones de euros, en función de la inflación. Es decir, durante los 27 años en que estará el servicio la autovía, el Estado tendrá que abonar al concesionario un total de 1150 millones de euros. Todas estas cantidades sin IVA.

¿Y el Estado qué gana con todo esto? La Administración se ahorra el coste de construir la autovía, cuya inversión se estima en 210 millones de euros. Y también el coste de conservarla y explotarla durante de 27 años, cuyo valor se estima en 120 millones de euros. Hagamos cuentas, 330 millones “ahorrados” frente a unos pagos futuros que ascienden 1150 millones de euros.

El Gobierno pervierte el significado de un contrato de concesión de obra pública con el fin de ejecutar una infraestructura sin desembolsar un duro hasta 2015, ahora que las arcas están exhaustas. Y lo que es más importante, de manera que el endeudamiento asociado a esta infraestructura aparezca dentro del balance del concesionario, sin figurar en las cuentas públicas como déficit y endeudamiento del Estado. Pero para ello el sistema europeo de cuentas exige que realmente se transfieran riesgos al concesionario, es decir, al capital privado que decide invertir en esta infraestructura.

Estamos ante otro ejemplo de “contabilidad creativa” que endeuda a todos los ciudadanos sin repercutirlo en las cuentas públicas. Otro engaño cuyas consecuencias acabaremos por descubrir dolorosamente más tarde o más temprano. Pues en la práctica, a partir de 2015 aparecerán 32 millones de euros a abonar anualmente por el Estado, actualizados en gran medida por la inflación que se produzca, durante la friolera de 27 años. ¿Qué diferencia hay entre esto y un endeudamiento a largo plazo? Teóricamente, que se han transferido los riesgos de construcción y disponibilidad al concesionario. Pero veamos cómo estos riesgos son realmente muy reducidos en esta concesión.

A diferencia de las concesiones de autopistas, que tradicionalmente se han licitado en España sobre anteproyectos escasamente definidos y, por lo tanto, con verdaderas incertidumbres sobre el coste final de la obra, en la autovía Benavente-Zamora el Estado aporta los proyectos de construcción ya redactados. Por lo tanto, el concesionario conoce perfectamente la definición de la obra, las unidades que la componen y las mediciones. Vemos como el riesgo de construcción está muy acotado.

El riesgo de disponibilidad es básicamente el riesgo que corre el concesionario de que los costes de conservación y explotación se incrementen sobre los previstos. ¿Pero se trata de un riesgo real? Hablamos de un tramo de autovía sin especiales dificultades, al que acudirán las principales constructoras españolas, que han construido y conservan miles de kilómetros de autovías y autopistas similares. ¿De verdad es un riesgo para estas empresas valorar correctamente este coste en un mercado conocido y para construir una infraestructura que nada tiene de singular?

Comparemos una vez más con la concesión de una autopista de peaje. Al carecer de proyecto de construcción, el riesgo de construcción es muchísimo mayor en el caso de una autopista. El riesgo de disponibilidad es similar. Y el riesgo más importante de las autopistas de peaje, el tráfico que el conductor elija el pago del peaje frente a otras alternativas, está ausente en la concesión Benavente-Zamora.

Vemos como se prostituye el significado del contrato concesional, en el que debe haber un verdadero equilibrio entre los riesgos que asume la Administración y los riesgos del capital privado, para servir el interés verdadero subyacente: continuar la fiesta, endeudarse sin que se que refleje en las cuentas públicas, poner a todos los ciudadanos a trabajar y pagar unos impuestos en favor del beneficio de unas sociedades concesionarias que apenas asumen riesgos.

Por último, y no por ello menos importante, ¿todo esto para qué? ¿Se trata de una infraestructura vital que servirá para paliar un estrangulamiento que está lastrando la ansiada recuperación económica? Visiten la carretera nacional entre Benavente y Zamora, observen que su trazado es bueno, que el tráfico es muy escaso. En definitiva, que la carretera sirve perfectamente a la demanda actual. ¿Es necesario acometer esta infraestructura precisamente ahora, en este momento económico tan difícil?




No hay otras prioridades ?
Domingo, 4 de septiembre de 2011
La Gaceta » intereconomia.com/noticias-gaceta/politica
Fomento resuelve pagar 1.356 millones por una autovía que el PP valora en 383
En mayo, el Gobierno presupuestó los 49 kilómetros del tramo Zamora-Benavente en 210 millones. Los populares denunciarán el “escándalo” ante el Tribunal de Cuentas.

El kilómetro, a 27,7 millones de euros. El Ministerio de Fomento publicó la semana pasada la licitación del tramo de la autovía A-66 que comunica Benavente y Zamora por más de 1.356 millones de euros. El PP de la provincia castellana, en lo que califica de “escándalo”, denuncia que el ministerio de José Blanco cifraba dichas obras en 267 millones de euros hace menos de mes y medio. Fomento, asimismo, había enmendado previamente su presupuesto inicial, fijado en 210 millones de euros a mayo de 2011.

De acuerdo con lo publicado en el Boletín Oficial del Estado, la partida respalda la “ejecución, conservación y explotación” hasta el año 2041 de tan onerosos 49 kilómetros de la Ruta de la Plata. El desfase del importe, radicado en un sistema de explotación mixto público-privado, engorda mediante una previsión anual progresiva que va desde los 39,2 millones en 2014, año de la puesta en servicio, hasta los 61,6 del último ejercicio comprometido, 2041. Los costes anuales de conservación de la autovía se cifran en torno a 1,2 millones de euros.

“Esta cantidad de 1.356 millones de euros”, denuncian los populares de Zamora, “supone un 500% más respecto al coste real de las obras”. En consecuencia, la formación conservadora solicitará, a través de sus parlamentarios nacionales, la intervención del Tribunal de Cuentas, con el objetivo de que “proceda al control y a la fiscalización de dicho procedimiento”. El cálculo realizado por el PP establece el valor real de las obras en 383 millones de euros, como resultado de un desembolso de 243,3 para la construcción de la autovía y de 140,6 para la edificación de un centro de conservación y obras de reposición, reparación y mantenimiento ordinario. El resto de la licitación, 972,3 millones, “corresponde”, en opinión del PP, “a gastos financieros que irán a parar al banco en pagos anuales hasta 2041”, por lo que el proyecto “contradice el espíritu del Pacto Constitucional para la limitación del gasto de las Administraciones Públicas, suscrito por los dos grandes partidos políticos nacionales”.

La A-66, garantizada.
Fomento, entre tanto, se lamentó ayer de la denuncia adelantada por los populares. “El PP intenta bloquear la construcción de la autovía Benavente-Zamora”, advirtió la secretaria general de Infraestructuras del ministerio, Inmaculada Rodríguez-Piñero, en declaraciones recogidas por La opinión de Zamora. “Se trata de un modelo solidario, porque no carga durante el periodo de construcción el coste de una infraestructura que será disfrutada por varias generaciones”, agregó, antes de la sentencia: “La autovía está garantizada, le pese a quien le pese”.




Domingo, 19 de septiembre de 2010
zamoradigital.net»REDACCIÓN Comarcas
Más de 200 personas reivindican en una marcha la autovía Ruta de la Plata

Más de doscientas personas, entre los que destacaron cargos institucionales de la provincia zamorana y de Castilla y León, han realizado una marcha para reivindicar la construcción del tramo de la autovía Ruta de la Plata entre Zamora-Benavente, último tramo que falta para culminación de la Ruta de la Plata que une Sevilla y Gijón.

A las 8.30 han salido dos expediciones de marchantes, unos desde la localidad de Montamarta y otros desde Barcial del Barco, todos rumbo a Granja de Moreruela con el fin de recorrer a pie buena parte de la carretera que une la capital con Benavente.
Así, cada uno de los grupos realizaron el trayecto, 18 kilómetros desde Barcial y 23 desde Montamarta, en una marcha que tenía como objetivo reivindicar la creación de esta futura autovía que, según han indicado, lleva muchos años parada y “sin moverse un papel para su puesta en marcha”.




Sabado, 18 de septiembre de 2010
zamoradigital.net»REDACCIÓN Zamora
Decenas de alcaldes y concejales secundan la marcha reivindicando la autovía

Un centenar de personas entre ellas decenas de concejales y alcaldes de Zamora marcharon en el día de hoy entre Benavente y Zamora en dos grupos de unas 200 personas que se encontraron en torno a la una del medio día en la Granja de Moreruela. La marcha institucional es una reivindicación apoyada por un centenar de asociaciones y colectivos de Zamora que consideran vital la construcción del último tramo de la autovía A-66 que discurre entre Gijón y Sevilla. Los 49 km del tramo Benavente – Zamora son los únicos pendientes de licitar por el Ministerio de Fomento.

La marcha concluyó con un encuentro con los vecinos de la localidad de Granja de Moreruela que se encontraba celebrando su día grande. La alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, se ha dirigido a los asistentes para reivindicar una vez la licitación de la autovía que es “tan necesaria y vital” para todos los zamoranos. También el alcalde de Benavente, Saturnino Mañanes, ha hablado a los asistentes y ha leído un manifiesto que será enviado al Ministro de Fomento, José Blanco, el próximo lunes para solicitarle en nombre de los pueblos, asociaciones y colectivos de la zona la licitación de la autovía antes que termine 2010.




Sabado, 18 de septiembre de 2010
El Norte de Castilla » Noticias Castilla y León
Peregrinación para pedir que se finalice la Autovía de la Plata
Más de 200 personas recorren a pie parte de la Ruta de la Plata para pedir la licitación simultánea de los tres subtramos que faltan entre Benavente (Zamora) y la capital zamorana.

Dividida en dos por la carretera N-630, la localidad de Montamarta (Zamora) no es una de las más tranquilas de la provincia por culpa del incesante tráfico que la atraviesa y esta mañana se convirtió en uno de los dos puntos de partida de la marcha reivindicativa en la que participaron más de 200 personas para instar al Ministerio de Fomento a licitar en el plazo más breve posible los tres subtramos que faltan de la Autovía Ruta de la Plata, que une Gijón con Sevilla.

A las 8.30 horas, unas 120 personas se reunieron en la plaza de Montamarta, veinte kilómetros al norte de Zamora, encabezadas por el presidente de la Diputación de Zamora, Fernando Martínez, y por la alcaldesa de la capital zamorana, Rosa Valdeón, además de una cohorte de diputados provinciales, concejales y alcaldes de localidades que demandan la infraestructura.

A la misma hora, el término de Barcial del Barco, situado doce kilómetros al sur de Benavente, servía como lugar de concentración para unas 80 personas, con el alcalde benaventano, Saturnino Mañanes, como cabeza visible y germen de la convocatoria, apoyado por el delegado de la Junta de Castilla y León en Zamora, Alberto Castro, y otra cohorte de representantes de consistorios de la zona.

El objetivo de ambas expediciones era cubrir a pie la distancia que separa los dos puntos de Granja de Moreruela, municipio ubicado en el centro neurálgico de la reivindicación y especialmente significativo, ya que en esta localidad confluyen las rutas a Santiago de la Vía de la Plata y del Camino Sanabrés, para revestir la marcha de un aire espiritual.

Reivindicación y peregrinaje
Una peregrinación reivindicativa, según los convocantes y los participantes, en su mayoría del Partido Popular, y una reivindicación peregrina para algunas voces socialistas de la provincia, que dejaron oír sus críticas en los últimos días ante lo que consideran una marcha oportunista, ateniéndose a la puerta abierta por el Ministerio de Fomento para terminar la infraestructura.

Si a todo ello se añade la precampaña electoral, que para más de uno comenzó ya hace meses, el caldo polémico de cultivo ya está servido. No son pocos los que manejan el argumento de que la autovía se llevará a término más tarde o más temprano, de forma que, una vez hecha, quienes convocan esta marcha tendrán una espléndida oportunidad para atribuirse parte del mérito. Cálculos de causa y efecto. Política y más política.

El caso es que, a pesar del rédito electoral o, al menos, preelectoral que pudiera conllevar la iniciativa, la marcha se desarrolló en un ambiente cordial y festivo, sin que la política marcara cada paso.

Ritmo frenético
Martínez Maíllo se colocó a la cabeza de la expedición de Montamarta e imprimió un ritmo frenético nada más partir, con una velocidad no inferior a ocho kilómetros por hora, que estiró el grupo hasta el extremo.
Recorriendo 5,5 kilómetros cada hora habría sido suficiente para cubrir de forma pausada los 23 kilómetros hasta Granja, llegando antes de las 13.30, hora fijada para la lectura del manifiesto, pero el presidente de la Institución provincial no desaprovechó la oportunidad de hacer gala de su buena forma física.

El grupo cubrió por caminos de concentración, la ruta primorosamente marcada con flechas amarillas con el apoyo del agente de la Guardia Civil Prudencio Matellán y no exenta de repechos que casi convirtieron en una fila india la comitiva, encabezada por Maíllo y cerrada por Rosa Valdeón.

La alcaldesa compartió en voz alta el secreto a voces del vigoroso ritmo marcado y, de hecho, el ‘coche escoba’ de Protección Civil le echó una mano oportuna y salvadora en ciertos tramos del recorrido. “Por la izquierda. Hay que ir por la izquierda, sin que sirva de precedente”, avisaba alegóricamente el presidente de la Diputación cuando los caminantes pisaban la carretera, ante las sonoras carcajadas de los más próximos. Entretanto, la vicepresidenta de las Cortes de Castilla y León, Carmen Luis, y la diputada de Deportes, Clara San Damián, daban a sus compañeros de filas una lección de coherencia política caminando convencidas por la derecha e ignorando los reproches en aras de la seguridad vial.

Rosa Valdeón, Saturnino Mañanes, Fernando Martínez Maillio, Juan Duo y Alberto Castro en la Granja de Moreruela junto a las personas que marcharon reivindicando la autovía Ruta la Plata

La logística de la marcha se completaba al final de cada tramo con un coche aguardaba a los caminantes con botellas de agua y agentes de la Benemérita se aseguraban de que el grupo cruzaba con seguridad las carreteras, cuando así lo exigía el trazado del Camino de Santiago. Incluso una empresa de la zona, pionera en la colocación de expendedores de leche fresca, obsequió a los peregrinos improvisados con su mejor producto en el último tramo, pasado Riego del Camino.

Los alcaldes de las localidades que reclaman la finalización de la autovía argumentaban con firmeza su petición y su apoyo a la iniciativa, respaldada también por figuras como la del campeón del mundo de piraguismo Emilio Merchán, uno de los mejores deportistas españoles de todos los tiempos. “Seguramente habría sido más fácil hacer el recorrido corriendo porque andando no sé cómo terminaré”, dijo a Ical mientras subía una cuesta con soltura.

Entretanto, desde el norte de la provincia, el otro grupo cubría un trayecto más amable, no sólo por salvar un desnivel descendente hacia el lugar de encuentro sino también por tratarse de un recorrido de 17 kilómetros, casi seis menos que el del lado opuesto. El alcalde de Benavente sonreía con franqueza al llegar a las afueras de Granja de Moreruela. “Creo que esta convocatoria ha sido secundada con ganas por todas las personas que defendemos nuestra tierra y que queremos lo mejor, ya no para la comarca de Benavente, sino para Zamora y para Castilla y León”, aseguró a Ical. “Me siento muy satisfecho y muy orgulloso”, añadió.

Manifiesto
Al final del recorrido, la pradera presidida por el Centro de Interpretación del Císter acogió la lectura del manifiesto suscrito por una docena de alcaldes y numerosas entidades y asociaciones públicas y privadas de la provincia de Zamora. Rosa Valdeón hizo de maestra de ceremonias, dando paso al alcalde de Benavente, quien leyó los tres folios explicando las historia y la naturaleza de la reivindicación. “La Ruta de la Plata, que se ha convertido en uno de los ejes más importantes para la vertebración norte-sur del oeste de España, está totalmente en servicio, con excepción de estos 49 kilómetros”, apuntó. “Los alcaldes de los municipios afectados acordaron realizar esta marcha para exigir al Gobierno de la Nación la licitación de las obras del único trazado que queda por construir de la autovía Ruta de la Plaza antes de que finalice 2010”, continuó.

Saturnino Mañanes terminó la lectura del texto recordando que “instamos al Ministerio de Fomento a que contrate la obra conjunta de los tres tramos en que se divide el trazado entre Zamora y Benavente, de tal forma que pueda comenzar la ejecución de la obra de forma inmediata”.

Los más de 200 participantes en la marcha conjunta y una serie indefinida de lugareños ávidos de un trozo de empanada y un refresco, degustaron el ágape que ofreció el Ayuntamiento de Granja de Moreruela antes de dispersarse. “Esperamos que esta acción tenga efecto pero, si no es así, no vamos a parar de reclamar lo que creemos que merece Zamora y lo que demandan los ciudadanos”, concluyó el presidente de la Diputación ante el asentimiento de Mañanes.


No hay comentarios :